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El valor de los abuelos

Abuelos que cuidan a sus nietos dejan huella en sus almas. Ver vídeo pinchando: AQUÍ

Ellos son nuestras memorias llenas de placer, diversión y ternura.

Hay personas que son puntos cardinales, que llevan nuestros sentimientos y emociones a su máxima intensidad. Los abuelos son ejemplos de esas personas, personas únicas, afectuosas e inolvidables.

Ellos simbolizan una unión que es generada en las miradas de complicidad, en el juego permisivo y comprensivo de un consentimiento sin medida que molesta a los padres.

Ellos son nuestras memorias llenas de placer, diversión y ternura. Historias llenas de cambios inesperados, cabellos blancos desacomodados por el viento y ojos que brillan al sol durante un paseo en que se siente el calor de las manos que transmiten sólo amor y comprensión.

Los abuelos tienen un doctorado en amor

El modo como los abuelos educan trae importantes beneficios al niño. ¿Por qué? Porque los abuelos que cuidan de sus nietos les transmiten diversas enseñanzas:

Pasatiempos como caminar, cuidar de las plantas, cocinar, etc.

Tradiciones e historias familiares: los niños se quedan impresionados al saber que sus padres fueron chicos un día.

Canciones, juegos y cuentos antiguos que están llenos de belleza y enseñanza.

Por otro lado, tanto su posición familiar como su experiencia de vida acumulada garantizan un modo de educación que es muy positivo para los niños. Esto se da de esa forma porque los abuelos tienden a:

Tener más paciencia y estresarse menos en lo cotidiano. Eso les permite ser más afectuosos con los niños y mostrarles de manera constante un interés afectivo a través de una relación empática.

La comunicación emocional es un pilar básico que permite a los nietos sentirse mucho más comprendidos por sus abuelos que por sus padres.

Corregir con sus nietos los errores que cometieron con sus hijos y, por lo tanto, dar una visión a los padres sobre ciertos aspectos.

Al mismo tiempo, los abuelos son mucho menos críticos y se enfocan más en las cosas buenas que en las malas, destacando así los puntos fuertes del niño más que los puntos débiles.

Otra bonita característica del modo de educar de los abuelos es que ayudan a los nietos a adquirir independencia de los padres, así como a socializar con personas de diferentes edades.

Muchas veces, los abuelos hacen el papel de abogados de los niños, sirviendo así de puente para validar sentimientos y resolver complicaciones que crean obstáculos en la convivencia y en la comunicación entre padres e hijos.

Frente a una situación de crisis e inestabilidad familiar como puede ser una separación, los abuelos son un apoyo emocional indispensable para los nietos.

Pero no sólo los abuelos dejan huellas en el corazón; los nietos también traen vitalidad, alegría y apoyan a sus abuelos de forma muy importante.

Cuidar de los nietos significa para los abuelos redescubrir el lado sorprendente del mundo, la inocencia y el amor más incondicional.

A veces los padres pueden sentir que los abuelos les están robando su papel de protagonistas, que se exceden dando a los niños todo lo que quieren sin nunca decirles que no. Nada más lejos de la verdad, pues cada uno tiene su lugar y su papel en la vida del niño.

Al principio, se puede pensar que los niños quieren a sus abuelos por lo que les dan y no por quienes son, pero a los nietos en realidad les encantan las tardes con sus abuelos por lo que ellos significan.

Entre otras cosas porque se apartan de las reglas con amor, con cuidado y cariño. Porque la forma de acordarse de cada detalle y cada momento hace de la infancia un lugar único y especial. Y porque son los reyes que nunca serán destronados.

El amor de los abuelos por sus nietos es tan grande que no pueden evitar demostrarlo de todas las formas posibles.

Cocinando, con regalos, con dulces, con su presencia, con sus besos, con los bolsillos llenos para que nos les falte nada, con una atención y un cuidado que transforma todos los rincones del hogar.

Los niños entienden esta generosidad sin límites como un cariño desmedido por el que son cautivados.

Y cuando los abuelos están lejos, los niños no sienten la falta de los chocolates, sino de lo que ellos significan: hablar con sus abuelos y escuchar palabras de ánimo, amor y sabiduría.

Al final, los abuelos son los mayores fans de sus nietos y los que más refuerzan su perseverancia, sus talentos, su determinación y sus triunfos.

Y no hay nadie como los abuelos que entienda tan bien la actitud decidida de sus nietos, sus canciones favoritas y sus ojos brillantes impregnados de pasión.

Por eso, el cuidado de los abuelos refleja un amor puro repleto de alegría y de objetivos. Un cariño que educa a los niños, que los protege de un modo único que no siempre es comprensible, que es indescriptible.

Ese es el motivo por el cual los abuelos que cuidan de sus nietos dejan huellas imborrables en el alma, un gran legado emocional.

Porque todos aquellos caprichos y regalos, así como las veces en que los abuelos fueron más rápidos para aliviar el dolor de sus nietos, hicieron que el crecimiento de ellos estuviera marcado por un amor pleno, puro e incondicional.

EL VALOR DE LOS ABUELOS Miguel Espeche