Ninguna TV grande respeta a los menores
Los ‘realities’, telenovelas y programas con contenidos inadecuados acaparan las tardes de las cadenas generalistas
Mar Tagle
Laura (10 años) ha salido del cole a las 17.00 horas. Vive a sólo dos manzanas y como sus padres están en el trabajo, le acompaña su amiga Ana por el camino. En quince minutos ya está merendando frente al televisor y empieza a hacer zapping. Son las 17.15 horas y estamos en el horario superprotegido para menores. ¿Qué ver? En La 1 Laura se encuentra con el final de la telenovela Amar en tiempos revueltos y sólo quedan 15 minutos para que comience el culebrón Victoria, cuya protagonista, una madre de 50 años. y con tres hijos adolescentes, vive una intensa historia de amor con un hombre veinte años menor. A Laura, los líos de faldas no le interesan mucho y cambia a La 2 pero todavía siguen con los documentales que le parecen un rollo y se pasa a Antena 3. Aquí se para un rato. Emiten Tal cuál lo contamos, le engancha poco. Hoy hablan de trucos para adelgazar. Laura mira su bocata de nocilla, sonríe y, una vez más, pulsa el mando a distancia.
En Cuatro y La Sexta están con series sobre detectives que investigan asesinatos y crímenes, pero como se ha perdido el principio —por estar viendo el final de Victoria—, no se entera de mucho y recurre de nuevo al mando. Telecinco, “la cadena amiga”, emite Mujeres y hombres y viceversa, un programa ideado para encontrar pareja pero que muchos concursantes ya han salido en varios medios asegurando que acuden al programa con la intención de hacerse famosos. Resumiendo, tras una hora haciendo zapping, Laura se ha terminado el bocata de nocilla y sólo se le ocurren tres opciones: cambiar a La 2 donde habrá empezado En construcción, el único contenedor infantil de las cadenas nacionales en abierto; encender la TDT y elegir entre Disney Channel o ClanTVE; o bien apagar la pequeña pantalla. ¿A alguien le sorprende que internet le este robando la audiencia joven a la televisión?
Las cadenas nacionales aseguran que el espectador tiene el poder de elegir entre los distintos canales e, incluso, decidir no ver la televisión. Sin embargo, el 9 de diciembre de 2004 las cadenas de ámbito estatal (TVE, Antena 3, Telecinco y Sogecable) suscribieron el llamado Código de Autorregulación de Contenidos Televisivos e Infancia. Más adelante se unieron la Forta, Veo, Net tv y La Sexta. En él, aunque no se obligaba a las cadenas a emitir una programación infantil, sí acordaron que protegerían a los menores de contenidos que podían ser perjudiciales “para el desarrollo físico, mental o moral de los menores”. Se estableció un horario protegido (de 6.00 a 22.00 horas) y uno superprotegido (8.00 a 9.00 y de 17.00 a 20.00 horas, de lunes a viernes y los sábados y domingos de 9.00 a 12.00 horas). En el código se detalló qué contenidos audiovisuales convierten un programa en no recomendado para los diferentes segmentos de edad, atendiendo a cuatro áreas: comportamiento social, temática conflictiva, violencia o sexo.
Además, se creó una Comisión Mixta que velaría por el cumplimiento del Código, y muchas asociaciones de telespectadores empezaron a hacer informes de forma regular para alertar de los posibles incumplimientos. Cuatro años más tarde todo apunta a que el Código no funciona.
Ineficacia
Los últimos datos publicados por la Comisión Mixta contabilizaban 216 quejas por parte de los usuarios. La gran mayoría por parte de Antena 3, La Sexta y Cuatro. De éstas, se aceptaron 71 (ver tabla). Lo sorprendente es que éstos datos son de marzo de 2008, hace ya un año. Desde El Observatorio de Contenidos Televisivos y Audiovisuales (OCTA) —iniciativa de la sociedad civil creada en 2005— aseguran que “la falta de datos oficiales muestra la ineficacia de la Comisión”. Aseguran que las cadenas “siguen emitiendo programas de adultos en la franja de protección reforzada, especialmente telenovelas y realities sensacionalistas o bien redifusiones de programas de madrugada, al tiempo que se estimula el consumo televisivo infantil nocturno colocando menores en series y programas a partir de las 22.00 horas”. Reclaman una “labor de vigilancia más activa de la fiscalía de menores para comprobar la correcta aplicación de la ley europea de Televisión sin Fronteras” y ponen a disposición de los consumidores la opción de denunciar los incumplimientos desde su propia página web .
La Sexta y ‘Sin Chan’
La Asociación de Telespectadores y Radioyentes (ATR) en su último informe de 2008, centrado en el horario de protección reforzada, contabilizó 62 incumplimientos diarios durante el mes de octubre y noviembre de 2008 y la TAC (Teleespectadors Associats de Catalunya) probaron que el 63% del tiempo analizado de junio y julio de 2008 incumplía el Código (76 de las 160 emisiones estudiadas). La mayoría por contenidos inadecuados y la falta de señalización. En los dos informes, La Sexta es la cadena que más quejas acumula y Shin Chan (Antena 3) el programa que se lleva la palma en denuncias.
El último informe sobre este tema, presentado hace dos semanas por la Ceaccu (Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios) y realizado por un equipo de profesores universitarios, dirigido por Manuel Sánchez de Diego (UCM), asegura que el público infantil está “marginado en las parrillas” y denuncia la emisión de autopromociones de programas para adultos en horario infantil así como “espacios inadecuados como realities, telenovelas o espacios del corazón”.
Mejorar el ‘feedback’
“Para solucionar este tema, quizás las propias televisiones tendrían que abrir más canales para que se mejore el feedback”, aseguran desde la federación de espectadores IcMedia, “Si el usuario ve que se hace caso a sus sugerencias, puede volverse más proactivo, lo que contribuirá positivamente a la fluidez en la relación de todos los agentes”. Una idea que comparten con la Asociación de Telespectadores (ATR) aunque éstos subrayan que las cadenas “ocultan la existencia del Código para que el usuario carezca de referencias éticas y no se lo reprochen”. Su solución: un sistema de sanciones En cambio para las cadenas “el mejor mecanismo es la Autorregulación. El código en estos años ha demostrado su eficacia, con un descenso en el número de quejas presentadas y un mayor compromiso de las cadenas en regular sus contenidos en la franja de super protección”, afirma Patricia Marco, Directora de Televisión y TDT de Telecinco. Desde Cuatro mantienen la misma idea. “Hay una vocación de las teles por hacer lo que marca el código”, asegura Alberto Alarcón, director de Programación a LA GACETA, “otra cosa es que no existan espacios que satisfagan a las asociaciones”. La 2 es la cadena que sale mejor parada en todos los informes. Icmedia incluso emitió un comunicado felicitando la decisión de TVE de retomar Barrio Sésamo. Y programas como Pocoyó y Los Lunnies han sido laureados en varios festivales internacionales. De hecho, desde TVE aseguran que “se enorgullecen de ser la única televisión ante la que podemos dejar a nuestros hijos sin miedo a lo que puedan ver”, aunque no explican a LA GACETA por qué emiten telenovelas en horario superprotegido. Ni Antena 3 y La Sexta han contestado a las preguntas sobre el Código presentadas por este periódico.
No se debe de olvidar que en el preámbulo del Código se hace una llamada a padres y tutores para que aprovechen el sistema de autorregulación y clasificación de programas como una herramienta de apoyo en el control de seguimiento que los menores hacen de los medios audiovisuales, los programas y los contenidos televisivos. Después de todo, si los padres de Laura o una canguro hubiesen estado en casa, quizás podría haberse ahorrado ver Victoria. Lo mejor que tiene la tele es que uno decide cuándo apagarla.
gaceta.es 25 de marzo de 2009