Es verdad que los tiempos han cambiado, noventa años después de que España quedara consagrada al Corazón de Jesús. Pero no es menos cierto que hoy seguimos necesitando los bienes de la reconciliación, de la solidaridad, de la justicia, de la concordia y de la paz, y que tenemos la certeza de que  el camino de la descristianización no conduce a ningún futuro de salvación y de verdadera felicidad para el hombre.

 El Cardenal Rouco Varela nos lo ha querido recordar en la homilía pronunciada este domingo en el Cerro de los Ángeles, con motivo del 90º aniversario de aquella solemnísima consagración.

 El terrible atentado de ETA que le costó esta semana la vida a un servidor de la seguridad y de la paz de todos los españoles lo ha puesto dramáticamente una vez más de manifiesto.  Nuestras jóvenes generaciones y sus familias siguen necesitando esa reconciliación, esa justicia y esa paz; y la pregunta vuelve a plantearse no con menor urgencia que en 1919: ¿será posible conseguirlos a espaldas de la fe en Jesucristo, ignorando el don de su Amor?

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 COPE 22 de junio 2009